La pandemia de la COVID-19 ha incrementado un 50% el número de ataques informáticos, aunque el año ya había comenzado con importantes aumentos de ransomware y otros ciberataques.
La situación actual ha hecho ver a las organizaciones que la ciberseguridad es una de sus más importantes estrategias, por lo cual anticiparse y frenar amenazas de pérdida de información y datos, está siendo incluida dentro de las políticas de gestión de las empresas. Sin embargo, todavía queda mucho recorrido para fomentar la concienciación.
La consultora Gartner pone de relieve cómo los sucesos que han presenciado durante el brote de COVID-19 son un ejemplo que destaca el enfoque fallido de seguridad cibernética de muchas organizaciones. Aunque los responsables de la seguridad se centraron en garantizar el cumplimiento y detener a los piratas informáticos, en ocasiones ignoran oportunidades simples como habilitar tecnologías de acceso remoto seguro, que tienen un impacto comercial mucho mayor. Afortunadamente, las organizaciones están luchando para ponerse al día.
Afianzando la seguridad
Los datos detectados durante el brote de coronavirus son solo el ejemplo más reciente de cómo a menudo se subestima la desconexión entre la seguridad y los resultados comerciales. Las organizaciones deben centrarse en la creación de controles adecuados, razonables, consistentes y efectivos en un contexto empresarial. De ahí que reforzar la seguridad sea el mayor de los beneficios de una organización. Así, la seguridad multicapa que proporciona Microsoft para centros de datos físicos, infraestructura y operaciones en Azure, es una muestra de ello.
Microsoft Azure demuestra como la seguridad es un impulsor de la modernización tecnológica de las empresas, así como ayuda a alcanzar objetivos de negocio. Actualmente, proteger las cargas de trabajo con rapidez mediante controles y servicios integrados en Azure que supervisan la identidad, los datos, las redes y las aplicaciones, es un importante beneficio.
La seguridad en la nube es una prioridad para Azure. Utilizar la plataforma en las aplicaciones y servicios corporativos es poder aprovechar una amplia gama de funcionalidades y herramientas de seguridad.
Las opciones de seguridad configurables, así como la capacidad de controlarlas, cubren plenamente los requisitos de implementación de las organizaciones exigentes.
Fuente: www.computerworld.es